Quiénes somos
Portugal, Julio del 2012
Ella hizo la cosa más loca de su vida – y la más aterrorizadora.
El aire caliente tocó su cara cuando ella tiró de su maleta roja, grande, en el andén de la estación de metro, en el aeropuerto de Oporto. Fue entonces cuando se dio cuenta de lo irreversible que era lo que habia hecho. Lejos, en el frío norte, había dejado todo: su tierra natal, el trabajo con el que siempre había soñado, su querido hogar y lo que ella más quería: a sua Pátria, o trabalho com que sempre tinha sonhado, o seu adorado lar e aquilo que lhe era mais querido – la Familia y los Amigos. Sin embargo, desde el primer momento aqui, sabía que queria a este lugar – el Sol en el cielo durante la mayor parte del año, el mar cercano, el olor de los naranjos, las personas sinceras y cálidas y, por supuesto, Él.
Estaba en el andén, escuchando las conversaciones apagadas y historias contadas a prisa… Era como si la gente quisiera resumir en cinco minutos los de meses de separación. Ella sintió una energía increíble que sólo encuentra aquí – la gente del sur de Europa. La composición del metro llegó. Ella volvió la cara hacia el sol y dio el primer paso hacia lo desconocido.
Al día siguiente comenzó a construir su mundo de nuevo desde el principio. Hechaba de menos su hogar, lo que la hizo buscar constantemente una parte de su país – un hogar acogedor, pequeño sustituto del hogar que habia dejado. Un día se compró en Internet, algunas bolas de luces, coloridas y brillantes. Era una mañana soleada cuando recibió y abrió el paquete. Imeadiatamente compuso su primera guirnalda de flores – era como una escultura hermosa, pero el verdadero placer vino al atardecer, cuando se encendió la guirnalda…
"¡Wow! ¡Son muy hermosas!" – pensó.
Fue esta noche mágica cuando se sentó, envuelta en una manta con una taza de té caliente en la mano, mirando a la guirnalda brillante, que nació su sueño de una tienda con bolas de colores brillantes, que estan llenas de luz y traen alegría miles de hogares. Y después de todo, los sueños están ahí para hacerlos realidad!
Y así se creó Luminart – de la nostalgia, del amor por la luz y los colores.